Cuando hueles un aceite esencial, una cascada de emociones, sensaciones y recuerdos inundan tu organismo en cuestión de milisegundos. Todo este proceso sucede de manera inconsciente e involuntaria… Pero ¿sabías que a través de la olfacción consciente puedes aprender a gestionar tus emociones, resetear memorias y estimular la cognición? Escribe Helena Chacón.
Además, aquellas partes de tu cerebro relacionadas con la identidad personal, afloran y se estimulan, por lo que una experiencia aromática consciente nos permite mejorar la relación con nosotros/as mismos/as, desarrollar autoconocimiento y producir una transformación interior.
Neurociencia de la olfacción y relación con las profundidades de la mente
Aunque no lo creas, tu cerebro empieza a “oler” incluso antes de que las partículas aromáticas entren en tu nariz. Cuando ves a otra persona inhalar un aroma, las reacciones faciales de ésta impactarán en tu corteza piriforme para crearte una expectativa sobre el aroma. Una vez lo hueles, se generan una serie de conexiones neuronales que son el resultado, por un lado, del efecto objetivo que tiene el aroma en base a sus moléculas, y, por otro lado, del efecto subjetivo, que resulta de tus experiencias previas y autobiográficas. Por ello, el efecto de nuestro olfato en la psique es una materia compleja que depende de muchos factores siendo determinante la persona que huele y su recorrido.
Encontramos cierta similitud con cada una de las regiones del cerebro estimuladas durante la olfacción y la mente según el yoga, tal y como te mostramos a continuación. Para que sea más “divertido” de aprender, lo hemos relacionado con un “personaje arquetípico”.
La Actriz. Mi mundo de emociones y sensaciones
Al oler un aroma, las moléculas aromáticas estimulan el nervio olfatorio que tiene una conexión directa con tu sistema límbico, tu centro emocional. El olfato es el único sentido que no necesita pasar previamente por el tálamo para ser procesado, sino que tiene un impacto directo en tus “sensaciones y emociones”.
La primera estructura que estimula el proceso olfatorio es la amígdala que hemos relacionado con “La Actriz” ya que vive y experimenta a través de las sensaciones, las emociones, el drama, etc. configurando una realidad movida por la atracción y el rechazo.
En esta primera fase de la olfacción, se estimula la mente externa o Manas, que es la capa más superficial de nuestra mente y la que nos comunica con el entorno. Cuando manas dirige nuestra vida, nos sentimos en una montaña rusa emocional, sin dirección, y sometidos a la vorágine de los sentidos sin ningún control. Por ello, hay que utilizarla sabiamente, trascenderla y conectarla con nuestro mundo interno.
La Bibliotecaria. Mi mundo de recuerdos y creencias
Otra de las estructuras estimuladas durante el proceso olfatorio es el hipocampo, que gestiona y almacena las memorias. Es decir, esta región te dice si el aroma lo conoces o no y hace aflorar experiencias previas incluso de tu infancia.
Nos recuerda a “La Bibliotecaria” que guarda y almacena los “libros de tu vida” para darte aquél que almacena los recuerdos necesarios en cada momento en base a tu aprendizaje.
A través de la olfacción podemos observar cómo aflora nuestra mente inconsciente conocida por los yoguis como Chitta. Este “océano mental” guarda nuestras vivencias, creencias y patrones preestablecidos creando huellas o marcas en nuestra psique conocidas como samskaras. Estas memorias son las causantes de que tengamos respuestas autómatas, condicionadas y aprendidas que en muchos casos no son beneficiosas para nuestro bienestar.
La Científica. Mi mundo racional y comunicativo
El proceso olfativo, impacta también en regiones de la neocorteza (c. orbitofrontal) permitiéndonos identificar, describir y crear un lenguaje olfativo.
Esta parte del proceso olfativo, que es cognitiva, la hemos relacionado con “La Científica”, que al igual que la mente Buddhi se encarga del discernimiento, la toma de decisiones y la gestión adecuada de la información procedente del exterior. Buddhi, utilizada sabiamente, puede poner en comunicación las experiencias de fuera (Manas) con mi mundo inconsciente (Chitta). O dicho de otro modo, a través del trabajo cortical podemos dirigir adecuadamente el proceso olfativo para modificar creencias y memorias.
La Yoguini. Mi mundo real
El proceso olfativo, cuando se desarrolla bajo la atención plena y el autoconocimiento, despierta zonas del cerebro que tienen que ver con la autoconciencia y la transformación personal. Por un lado, la corteza cingulada se encarga de hacer consciente todo el proceso, y, por otro lado, la ínsula, me conecta con la idea de identidad ayudando a desarrollar la conciencia sobre mi postura corporal y mental.
“La Yoguini” es la figura que representa la presencia durante el proceso olfativo en la cual te haces consciente del efecto “personal” único e intransferible del aroma en ti y tu mundo. Está relacionada con Ahamkara o Ego en yoga, es decir, la identidad y la capacidad que tenemos de ser conscientes de nuestro propio estado.
Transformación personal a través de la olfacción consciente
Todo el proceso de la olfacción consciente bajo la visión de AromaYoga® HY pasa por una primera etapa de autoobservación a través de la atención plena que permita reconocer lo que aflora. Después, liberamos y expresamos aquellas emociones y sensaciones corporales para favorecer el flujo de la energía y liberar bloqueos. Y a continuación, entramos en la fase de transmutación, que es el cambio interno, la transformación, que nos permite sustituir creencias, memorias y condicionamientos que nos hacen daño por otras más afines a nuestro alma y bienestar interior.
Gracias al proceso transmutador de la olfacción consciente podemos crear nuevas memorias olfativas, disminuir la reactividad emocional, bajar el umbral de dolor, ampliar el rango de tolerancia al estrés y modificar las respuestas condicionadas. Bajo el prisma de la Teoría Polivagal del Dr. Porges, nos permite mantener durante más tiempo en activo la rama ventral del nervio vago, es decir, nuestra zona de bienestar y conexión social. Es decir, nos sentimos mejor en nuestro mundo interno y externo.
Todo este proceso de transformarnos en una nueva versión de nosotros mismos se produce gracias a lo que la ciencia conoce como neuroplasticidad cerebral. Para que se produzca, necesitas dos piezas clave: la repetición constante y hacer uso de técnicas adecuadas para ti. La metodología AromaYoga® HY te propone varias herramientas integradoras entre yoga, meditación y aromaterapia que te ayudarán en transformarte en tu mejor versión.
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Esta formación pertenece al grupo de formaciones de Especialización de Holistic Yoga (Escuela Yoga Kula).
Helena Chacón, profesora y formadora de Yoga y terapeuta holística.
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