Entrevista con Zaira Leal: «Nutrirte es dar a tu Ser lo que necesita para evolucionar»

2017-09-07

Yoga en la cocina es un libro singular, porque aporta consejos para nutrirnos por dentro y por fuera basados en yoga, tantra y ayurveda. «Te lleva a divinizar la materia a través de prestar la atención a las tareas cotidianas y a las cosas que haces todos los días casi sin pensar». Es una entrevista para YogaenRed.

Zaira Leal

Zaira Leal es experta en yoga y formadora, escritora y coach de salud, bienestar y del estilo de vida ayurvédico. Profesora acreditada de la técnica Bowspring, profesora certificada de Anusara® Yoga y de Vinyasa Yoga, certificada por el Chopra Center for Wellbeing, Zaira ha desarrollado programas de yoga y bienestar para adultos, de perfeccionamiento de profesores, para mujeres, con fines terapéuticos, para niños y adolescentes. Es autora del título Una fiesta para el alma, también publicado por Ediciones Urano.

Por el título se diría que Yoga en la cocina es un libro de cocina, con recetas culinarias más o menos vegetarianas. ¿Es realmente «solo» eso?
Yoga en la cocina tiene recetas de cocina y mucho más. La dirección a la hora de crear el libro fue la de presentar al lector un enfoque sobre la nutrición en el que la base es nutrir el Ser, que está compuesto de tu cuerpo pero también de tu mente y tu alma; los alimentos que comes o bebes son sólo una pequeña parte de lo que te alimenta.

En el mercado existen libros de cocina maravillosos y teorías nutricionales muy acertadas, pero casi ninguno habla de alimentarnos en nuestra totalidad. Cuando empiezas a vivir conscientemente, te vuelves más sensible a lo que te rodea y sientes la necesidad de crear una vida armoniosa y que nutra todo tu ser. El planteamiento holístico que recomienda Yoga en la cocina es esencialmente yóguico y es lo que enfatiza el libro. En cada capítulo encontrarás recomendaciones ayurvédicas llamadas “ayurtips” así como una práctica de posturas físicas, una serie de recetas, un superalimento relevante para el tema del capítulo, un aceite esencial, un ejercicio de reflexión escrita y una meditación. Como veis, está repleto de prácticas muy útiles y accesibles para la vida actual. Y sí, es un libro vegetariano-vegano.

¿Qué te inspiró para escribir el libro, cuál fue la motivación más fuerte?
Siempre he sentido que el público general asocia el yoga con una serie de posturas físicas y punto, cuando, en realidad, es un estilo de vida que influye en aspectos tan simples de nuestro día a día como la hora de levantarse, la forma de lavarse los dientes o la respiración. El yoga trabaja bien cuando incluimos todas las áreas de aplicación. Sólo hacer asana, no funciona, sólo meditar, tampoco. Una práctica de yoga asana que no esté apoyada por la dieta y la forma de vida adecuadas no te va a llevar muy lejos.

La base del tantra-yoga y del ayurveda tiene un enfoque integrador que se manifiesta en los diversos aspectos de la vida. Por eso Yoga en la cocina es singular, porque te habla de todo al mismo tiempo. Es realmente espiritual pues te lleva a divinizar la materia a través de prestar la atención a las tareas cotidianas y a las cosas que haces todos los días casi sin pensar. Mi visión es siempre muy práctica. A la hora de escribir, me baso en las preguntas que me hacen mis clientes y alumnos, en sus inquietudes y necesidades. Lo que más me interesa es ofrecer herramientas sencillas que todo el mundo pueda empezar a utilizar a medida que se va leyendo el libro.

¿En qué consiste para ti la Nutrición con mayúsculas?
¡Buena pregunta! Nutrirse, con mayúsculas, quiere decir que en el proceso de alimentarte tienes en consideración la mente y el alma, y no sólo te limitas al cuerpo físico. Le das a tu Ser lo que necesita en cada momento para que pueda evolucionar hacia una mayor luminosidad. A través de lo que ingieres introduces energía e información en tus células, pero también tienes la oportunidad de hacer un trabajo de indagación y sanación internas.

La manera como te relacionas con la comida dice mucho de ti mismo o de tu trayectoria. Piensa que el físico es el terminal, lo más externo de tu ser o la puerta de acceso a tus cuerpos sutiles. ¿Por qué limitarte a pensar que tal o cual sustancia hace esto o lo otro en tus células cuando puedes aspirar a comprender que tu físico mantiene una relación de interdependencia con la mente y el alma?

En Yoga en la cocina hablo de nutrición alquímica porque a través de tu manera de alimentar el cuerpo, la mente y el alma puedes ir transmutando tu estado actual para crear tu cuerpo de Luz, que es un nivel de existencia más elevado si lo miramos desde el punto de vista del crecimiento interno.

¿Los yoguis y yoguinis suelen alimentarse bien?
Estamos en un momento en la evolución planetaria en la que se nos brinda la oportunidad de despertar al guru interno que cada uno lleva dentro, pero este es un proceso lento, largo y trabajoso. El auténtico yogin mantiene una relación muy directa y abierta con su propio Ser, y por lo tanto sabe qué es lo que su cuerpo-mente-alma necesita en cada momento para estar bien alimentado. La clave está en la conexión con tu centro, que, una vez despierto, es lo que te va a dar la pauta para saber si te estás alimentando bien o no.

Desafortunadamente, la mayoría de las personas que practican yoga hoy en día no han sido educadas en cuanto a la dieta o el estilo de vida más propicio para su práctica. Una vida yóguica no es compatible con la comida basura ni con el ritmo frenético de muchos. Cantidad de veces he visto a gente pasarlo verdaderamente mal en retiros de yoga porque no podían comer animales durante cinco días o tenían que estar sin beber café. Un caso alarmante es el de las clases de yoga en las que se bebe cerveza o el de profesores de yoga que justifican comerse una hamburguesa utilizando argumentos poco coherentes. La triste verdad es que, yogins o no, la mayor parte de la gente no se alimenta bien. Sólo hay que sentarse en la calle a ver los cuerpos pasar o hablar un rato con la gente para observar los mensajes detrás de sus palabras. Lo genial es que ¡nunca es tarde para cambiar!, pues es increíble lo rápido que el cuerpo-mente-alma reacciona cuando haces cambios saludables.

Como coach de bienestar cuerpo-mente-alma, ¿de qué patrones y alimentos es más difícil deshacerse en un proceso de cambio de hábitos alimenticios?
Lo más difícil es cambiar la adicción a ciertos pensamientos sobre la alimentación y la comida. Es increíble lo condicionados que todavía estamos en relación a este tema. Este invierno mi hija adolescente decidió hacerse vegana al 100% y fue súper interesante observar la reacción entre sus compañeros de clase. Todavía en el 2017 le decían que iba a tener anemia, que no era sano o que su cuerpo necesitaba comer carne animal para estar feliz. ¡Me parecía estar escuchando a mis tías mayores cuando me hice vegetariana hace veinticinco años!

Incluso alguien que lleva muchos años estudiando nutrición todavía puede ver enganches negativos o patrones erróneos en relación a la nutrición. Algunos de ellos son el fanatismo, la rigidez absoluta o los extremismos que a veces provocan que te comportes como un «poli» nutricional.

En segundo lugar, está el lavado de cerebro que nos hace la industria alimentaria. Pon la tele por la tarde y verás anuncios de comida nada saludable uno detrás de otro cuando justo esa hora es prime time del horario infantil. Y tercero, pensando en un nivel más básico, la adicción más fuerte hoy en día es la del azúcar y los hidratos de carbono refinados. Si quieres hacer un cambio significativo, deja el azúcar ya.

Cuando escuchas “no me alimento bien porque no tengo tiempo”, ¿qué piensas?
Que es una excusa para no responsabilizarse de uno mismo y de la propia salud. Comer bien no lleva mucho tiempo, claro que sí necesita atención y disciplina para romper con los programas antiguos. Si tienes tiempo para esperar a que te sirvan el menú de macarrones con tomate y filete con patatas, tienes tiempo para cocer una verdurita en tu casa. Lo mismo sucede con la meditación, la práctica de yoga asana y todo lo demás. Es cuestión de dar prioridad a lo que realmente importa: la relación contigo mismo. También es cierto que hace falta planificación. Como ejemplo te cuento que los domingos por la tarde en mi casa hacemos los menús de la semana y marcamos en el calendario cuándo vamos a ir a la compra, luego es cuestión de ir cocinando con sentido común.

¿Cuál es el culto al cuerpo que debemos seguir?
Me encanta pensar en el “culto al cuerpo”, pues la idea de sentir devoción hacia la vida física es muy tántrica. Pero digamos que no es un culto superficial, sino profundo. Tiene algo que ver con desarrollar un cuerpo escultural o los mejores glúteos del barrio, pero eso no es más que un primer pasito. El cuerpo es la antesala del Ser, es tu templo a la vez que tu mejor compañero, maestro y herramienta para el despertar. Aquí y ahora estás encarnado en un cuerpo físico, ¿no crees que es hora de empezar a relacionarte con él conscientemente? Tiene todos los mensajes, las enseñanzas y las claves para tu evolución, si aprendes a escucharlas, claro. El cuerpo que has tomado en esta vida lo vas a abandonar, pero mientras vivas en él, aprovecha para hacer un trabajo de transmutación interna y para despertar su divinidad, que es la tuya y la de la existencia entera.

¿Cuál es tu mejor receta o fórmula secreta para mantener cuerpo y mente en forma?
Seguir la rutina diaria armónica que recomiendo en el libro, incluida la comida SLO (simple, local y orgánica) de la que aprenderás más al leer Yoga en la cocina.

Meditar. Relajar. Celebrar.

Yoga en la cocina, de Zaira Leal, ya está disponible en librerías.