Esta sección de Astrología + Yoga es fruto de la colaboración entre una astróloga y una profesora de yoga. ¿Qué nos trae este mes de octubre? ¿Cómo puede ayudarnos el yoga a afrontar sus desafíos y aprovechar sus potencialidades? Escriben Florbela Cristóvao y Montse Ramírez.
Empezamos octubre con mucha energía en Virgo, signo de tierra, siguiendo la necesidad de reordenamiento y reestructuración que se ha hecho evidente desde la primera semana de septiembre. En este sentido octubre nos coloca bien en medio de un proceso con vista a crear un nuevo orden en nuestras vidas.
La conjunción de Venus y Marte el día 5 también en el signo de Virgo inaugura un ciclo donde nuestra atención estará enfocada hacía todo lo que tenemos aún por mejorar, perfeccionar, corregir, y nos pide una clara consciencia sobre los procesos de sanación que todavía están por hacer. Por eso no podemos negar el mundo emocional, ya que si lo negamos nos estamos impidiendo esta nueva etapa de ordenamiento y reestructuración. Estos dos planetas personales en Virgo durante la primera quincena sugieren la necesidad de dedicación y trabajo para implementar en el mundo material de la forma y de las cosas, las visiones inspiradas y creativas de lo que queremos y deseamos. Durante todo el periodo hay un notable acento sobre la necesidad de actuar con pragmatismo, realismo, productividad y eficiencia en nuestras vidas, cualidades clave en el arquetipo de Virgo.
El pasaje del Sol por Libra a lo largo de octubre, nos recuerda también el valor de la armonía y la ecuanimidad, tal como ahora se presenta en el ciclo natural de las estaciones, la igualdad entre la duración del día y de la noche. Cabe reconocer la naturaleza dualística de la vida, su correlación con la dimensión de los opuestos que existe en nosotros mismos, siendo por ello el mayor desafío integrar y armonizar el caos y el orden, el goce y el dolor en nuestro propio orden interno. Libra es en el zodiaco el signo que se relaciona con las dinámicas de proyección, tan bien simbolizadas por el espejo, objeto tan típicamente venusino. De la misma forma, siempre que no reconocemos una polaridad, los extremos en nosotros mismos, lo iremos vivir a través del otro, afuera, a través de nuestras relaciones, que no hacen más que poner en evidencia los opuestos no reconocidos por nosotros, dando así realidad a nuestra sombra psíquica. El don de Libra es precisamente armonizar contrarios, los dos platillos de la balanza, vivir en la tensión creativa, en lo nuevo que emerge a partir de lo que era aparentemente contradictorio. Siempre que no hacemos este trabajo en nuestro firmamento interno, y nos quedamos identificados solamente con una parte de nuestro yo en el juego de los espejos, quedamos atascados en un interminable proceso de repetición, origen de toda neurosis. La dinámica entre opuestos a partida irreconciliables es la tensión permanente que subyace al equilibrio que Libra nos enseña.
Tanto la oposición de Júpiter a Urano durante los primeros días del mes, como la luna llena del día 19, sugieren la necesidad de ir a por algo nuevo y valioso para nosotros, un fuerte anhelo de mayor independencia y necesidad de liberación de antiguas pautas que ya no funcionan más en nuestros relacionamientos. Es una llamada a actuar desde nuestra integridad, a hacer valer nuestros valores personales en sistemas sociales mayores y en función de un propósito mayor de vida. Marte en Virgo opuesto a Quirón durante la lunación, es análoga a la imagen del cuchillo bien afilado del cirujano y tal como el, necesitamos durante este periodo operar con precisión y discernimiento para cortar y sanar lo que está enfermo.
Con la entrada de Júpiter en Escorpio a partir del día 10, se inicia un nuevo ciclo personal y colectivo que nos afectará a todos de distintas formas a lo largo de los próximos 13 meses. Júpiter en Escorpio tiene la cualidad de intensificar nuestros deseos y denunciará toda voluntad del ego que no esté alineada con el deseo mayor de nuestra alma en su proceso evolutivo. En este sentido, podremos ser confrontado con decisiones difíciles, con miedos y traumas por resolver. Pero Escorpio es un signo de poder y regeneración, y es por ello que también nos puede catapultar hacía un ámbito de mayor significancia en nuestras vidas, de profundizarnos en nuestra sombra y desde ahí llevarnos a vivir relaciones en un nuevo y mayor grado de intimidad. Escorpio es el arquetipo donde se traba la gran lucha entre el deseo del ego y el deseo del alma, donde finalmente podemos restaurar la unidad del cielo con la tierra. Octubre será el mes donde empezaremos a sentir esta dinámica que como antes referí, nos acompañará a lo largo de un año.
Vaciar, renovar, confrontar (octubre 2017)
Octubre llega con grandes cambios astrológicos que nos invitan a transformar nuestro interior: dejar las máscaras, soltar los miedos, escuchar nuestra voz interna y asumir la responsabilidad de nuestras vidas en lugar de aferrarnos a patrones, sobre todo emocionales, cada vez más tóxicos y destructivos.
En este contexto, os propongo la práctica de Murcha Pranayama Ujjayi, una técnica respiratoria relajante que hace énfasis en vaciar. Consiste en realizar una inspiración profunda con una parada natural de un segundo a pulmones llenos y a continuación una espiración larga, más larga que la inspiración, con una parada natural de un segundo a pulmones vacíos. Se puede hacer varias veces a lo largo del día en ciclos de doce respiraciones cada vez.
Alargar la espiración tiene el efecto terapéutico de calmar las emociones y serenar la mente. Una espiración larga, practicada con atención y conciencia, tranquiliza y relaja. Y si la acompañamos de la intención llevando nuestro pensamiento a reducir, vaciar, eliminar: toxinas, cansancio, estrés, negatividad…, sus efectos se verán multiplicados.
Información elaborada por:
Florbela Cristóvão, astróloga transpersonal (consultas de cartas astrales, presencial y por Skype, encuentros y talleres) morbela@hotmail.com
Montse Ramírez, periodista, profesora de yoga – coordinadora de Escola Yogavida Info@escolayogavida.com