Leyes universales femeninas

2018-05-03

El despertar del principio femenino divino o Shakti es un foco primordial de la intención en la práctica del tantra y del yoga, por eso este mes de las flores y del resurgir de la tierra escribo sobre algunas de las leyes universales femeninas. Escribe Zaira Leal. 

Es un alivio saber que todas las tradiciones del planeta coinciden en decir que a la mente humana le resulta difícil comprender qué es lo divino. y los grandes maestros hacen hincapié en recordarnos que lo absoluto es imposible de describir con palabras ni pensamientos. Lo bueno es que también coinciden en explicar que, cuando despertamos, somos capaces de sentirlo en todas las células de nuestro cuerpo-mente-corazón. Sin embargo, aunque lo divino sea inexplicable, te confieso que a mí me ayuda mucho intentar comprender la naturaleza esencial de la vida también a nivel mental.

Las leyes universales femeninas son la manera como se manifiesta Shakti en el mundo. Imagínate que estás dando un paseo nocturno durante una noche clara de verano, puede que no veas la luna desde donde estás, pero sí puedes percibir su luz plateada y lechosa iluminando el camino. La relación entre tu esencia femenina y sus leyes universales es similar pues, aunque todavía te resulte lejana la idea de Shakti, sí puedes acercarte a ella a través del trabajo con sus leyes universales y dejar que ellas impregnen tu día a día con la esencia del principio femenino divino.

En mi programa Mujer Radiante exploramos diez leyes universales femeninas, no sólo lo que son sino también su aplicación en la vida de toda mujer. Me gustaría compartir contigo una pequeña descripción de cinco de ellas. Espero que te apoyen en tu evolución y que las disfrutes mucho como si fueran a la vez las flores, su fragancia y el sentimiento interno al disfrutarlas.

1. La transformación

La primera ley universal femenina es la transformación porque la tierra, la materia, es transformadora. La tierra tiene la capacidad de transformar todo aquello que se le entrega y de darle continuidad a esa energía. De las hojas secas y muertas hace compost que sirve para nutrir y regenerar el bosque.

La mujer tiene acceso directo a los códigos de la transformación de manera que es capaz de transformar todo aquello que llega a su vida para darle continuidad. Una casa vacía se convierte en un hogar lleno de amor. De unas cuantas hortalizas hace un guiso delicioso. Con un abrigo de hace tres temporadas crea una prenda de último modelo. Las lágrimas del sufrimiento las convierte en comprensión. Hace una transmutación de los karmas y las memorias del pasado y éstos le ayudan a evolucionar en su camino evolutivo ascendente.

2. La paciencia

Paciencia es la capacidad de soportar algo sin alterarse, de saber esperar y de mantenerse en calma durante el desarrollo de los acontecimientos. La vida, en muchos aspectos, es una carrera de fondo y llega quien persevera, consciente, paciente y respirando.

Esta ley universal femenina es la energía de una madre embarazada. Las últimas semanas antes de dar a luz se le hacen muy largas, está deseando ver la carita de su bebé, de arroparlo entre los brazos y de quererlo mucho, pero lo único que se puede hacer es esperar paciente hasta que llegue el momento.

Cuando el código de la paciencia está activo, no fuerzas las cosas para que sean de una manera o de otra ni para que sucedan con más rapidez. Por el contrario, respiras, disfrutas del lugar en el que te encuentras y te mantienes centrada en el camino.

3. La confianza

La confianza te da alas para volar por encima de todos los peligros. En esos momentos en los que las cosas se ponen muy difíciles, te sientes en un cruce de caminos o parece que la vida te pone contra las cuerdas, la confianza es tu mejor aliada. Cuando me encuentro así, me pongo sus alas, respiro con el viento, despliego mis plumas y planeo con las corrientes.

Últimamente se siente una vibración de miedo terrible, las personas estamos atemorizadas, no nos atrevemos a nada y hemos creado una zona de confort cada vez más pequeña. Todo ello son señales de que esta ley universal femenina está ausente. Es cierto que el mundo de ahora es incierto y está lleno de peligros, pero también lo es que estas circunstancias sociales y políticas son justo lo que cada uno de nosotros ha pedido para poder evolucionar y fortalecer nuestra luz.

4. La compasión

La manera más refinada de amar se llama compasión. Eres capaz de sentir con el otro, de ponerte en su lugar y de comprender por lo que está pasando. Todos somos parte del tejido infinito de Consciencia que crea la vida y cada uno de nosotros desempeña un papel necesario para el desarrollo de la evolución de la vida de todos en conjunto. Es fácil amar a quienes nos caen bien y no lo es tanto cuando se trata de personas que nos aprietan donde más nos molesta. Desarrollar la compasión nos hace amar a todos por igual, con ecuanimidad. No debemos juzgar si alguien es bueno o malo porque en términos de Consciencia eso no existe. Hay personas malvadas, sí, pero quizá estén en tu vida para que tú comprendas algo a nivel profundo. Además, recuerda que aquellos que hacen sufrir a los demás, son personas que llevan dentro un dolor muy grande.

Por otro lado, ser compasivo no quiere decir que no hagas nada por intentar mejorar o proteger la vida. Puedes ser un activista yóguico que actúa en el mundo amorosamente, con firmeza y libre de odio.

5. La gratitud

¿Qué pensarías si te digo que el secreto de la abundancia se encuentra en la gratitud? Hemos sido entrenadas por el sistema económico de consumo para ver la carencia, cuando en realidad, la mayoría de nosotras tiene mucho, mucho más de lo que se necesita para ser increíblemente felices. El acto de agradecer algo, por muy pequeño que sea, te hace reconocer las bendiciones que ya hay en tu vida y en ese reconocimiento se crea la dirección energética que permite que la vida multiplique todo aquello que ya tienes.

Hay un ejercicio muy bonito que puedes hacer cada noche: antes de acostarte, anota en tu diario cinco cosas por las que estás agradecida ese día. Verás cómo en muy poco tiempo parecerá que tu vida es una fuente de muchas experiencias buenas.

6. La celebración

El dinamismo del principio femenino divino te invita a bailar con la existencia entera. Es una manera de celebrar con todo. Celebras porque estás viva, porque cuando sopla el viento suave a finales de la primavera los árboles te regalan una lluvia de flores, porque puedes abrazar, reír, llorar, sentir y vivir conscientemente. Cada segundo del día te ofrece la posibilidad de celebrar; párate a observar y lo verás.

La celebración trae consigo la alegría, la jovialidad y el gozo por la vida. Es dicharachera, vital y cantarina. Cuando permites que fluya en tu vida desaparecen las quejas, el sentimiento de víctima o el “pobrecita de mí”. Esto significa que estás todo el día de fiesta, a ratos de manera más efervescente y a ratos de manera más pausada hacia el interior, en ambos casos, siempre con una sonrisa en el corazón.

Mujer Radiante Online es un programa que puedes seguir/adquirir en la Escuela Online de Zaira Leal.

Zaira Leal es autora de Una fiesta para el alma, Ed. Urano 2014, y de un segundo libro que se publicará en junio de 2017. Se considera yoguini desde la cuna y empezó a enseñar yoga en el año 2000. Imparte clases públicas y formaciones para profesores de yoga y meditación, programas de perfeccionamiento para profesores, así como talleres monográficos de salud y temas para la mujer. También trabaja como coach de salud y bienestar del estilo de vida ayurvédico.

Lingüista, es máster en enseñanza y está acreditada en diversos estilos de yoga, meditación y ayurveda.

Más información: zairalealyoga.com / www.facebook.com/zaira.leal.5 | ©zairaleal