Or Haleluiya y Álex Monasterio: «Todos necesitamos el Yoga Terapéutico»

2017-06-12

Son especialistas en fusionar yoga con fisioterapia y osteopatía para tratar las patologías del aparato locomotor. «Muchos creen que sentir el cuerpo y sus sensaciones es suficiente. Y no es cierto. Hay desalineaciones y afecciones que no son percibidas con la consciencia corporal». En esta interesante entrevista nos despejan muchas dudas.

Hoy día, hablar del Yoga Terapéutico es como hablar de un tema tan vasto como la música… Hay muchas corrientes y enfoques diferentes. Algunos se enfocan en la capa energética, otros en la emocional, los meridianos chinos y el ayurveda. Y todo es válido y necesario. «Nosotros nos dedicamos al estudio y abordaje de las patologías del aparato locomotor -dicen Or y Álex-. De ahí nuestro nombre, FisiomYoga, fusión del yoga con la fisioterapia y la osteopatía. Aunque también ponemos en relieve aspectos psicoemocionales relevantes para mejorar el estado de salud debido a la intrínseca relación que hay entre las diferentes capas».

¿Cuáles son las diferencias entre el Yoga Terapéutico y otras terapias de tratamiento físico?
1. Liberación de los tejidos miofasciales:

El Yoga Terapéutico usa las posturas, movimientos y el uso de determinados utensilios (“props”) para la mejora de la funcionalidad corporal y la fisiología de los tejidos implicados en una patología, lesión o alteración biomecánica. No utiliza la terapia manual como en otras disciplinas.

La práctica de Yoga Terapéutico bien fundamentada en el conocimiento avanzado del aparto locomotor mejora el equilibrio de las tensiones y reduce el tono y las densidades de los tejidos miofasciales implicados en una afección determinada para, no sólo disminuir o  eliminar síntomas, sino actuar sobre las causas que originaron el problema o los problemas que afectan a la persona para fundamentar de manera adecuada la mejora de su estado de salud.

Hay que recordar que densidades en el sistema miofascial, generadas por múltiples causas, limitan la funcionalidad generando conflictos mecánicos articulares, estresan el funcionamiento muscular y condicionan la postura corporal y, por lo tanto, también el movimiento. La práctica de Yoga Terapéutico mejora el equilibrio biomecánico que a menudo está afectado por desalineaciones biomecánicas que todos tenemos o por una lesión mal curada. Y lo bueno es que la práctica reduce el estrés mecánico que recae sobre estas estructuras articulares y miofasciales a través del movimiento, de posturas adecuadamente seleccionadas y la consciencia postural. Todo ello, sin intervención de la terapia manual, ¡solamente con ejercicios bien enfocados y bien hechos!

2. Reeducación postural:

El alineamiento de las estructuras corporales es fundamental, ya que suele estar detrás de muchas de las patologías o procesos dolorosos del aparato locomotor. La reeducación postural supone una herramienta importante en este sentido y también a nivel preventivo para evitar o retrasar la aparición de patologías. Así pues, tanto la reeducación postural como del movimiento o uso que hacemos del cuerpo favorece la propia funcionalidad de las estructuras del aparato locomotor y evita la acumulación de tensiones y densidades miofasciales anómalas.

3. Equipo multidisciplinar:

Una red de profesionales que entienden que los procesos de salud pueden llegar a ser complejos y que a menudo, se necesita un equipo para que cada uno incida desde su especialidad sobre las capas del alumno de las que son competentes y así poder transformar su condición.

Para nosotros, la «competencia» no tiene lugar , sino que nos enfocamos en la complementariedad para conseguir una meta en común, que es la mejora del estado de salud de las personas.

4. Programa diario:

El profesor de Yoga Terapéutico/Yogaterapia suele dar «deberes», programa diario, tanto de práctica como por escrito, para que sus alumnos practiquen en casa o que reflexionen sobre algún tema psicoemocional y espiritual que les pueda servir tanto para mejorar su condición física como para gestionar mejor el dolor y la aceptación de su estado presente.

Se trata de establecer una dinámica de confianza con el cuerpo y el proceso de salud, sin caer en la pasividad, relegando toda la responsabilidad de la recuperación al profesor. Uno toma las riendas de su condición, cambiando hábitos posturales y de la gestión emocional para así transformar no solamente los síntomas de su condición, sino realmente llegando a las causas que le han producido la condición en primer lugar.

5. Alumnos eternos:

Los profesores de Yoga Terapéutico saben que cada persona que presenta una lesión, patología o alteración biomecánica es un caso único con sus propias particularidades que las diferencia de otras personas diagnosticadas de la misma afección. Por eso, la práctica como instructor de Yoga Terapéutico, en sí misma, es enriquecedora. Cada caso que se aborda ofrece la posibilidad de profundizar en el conocimiento de las diferentes koshas. De esta manera, además de formándose de manera continuada, se adquieren herramientas y destrezas para poder servir de la manera más óptima posible.

6. La práctica del Despertar:

El Yoga Terapéutico también incluye un conjunto de prácticas enriquecedoras y eficaces para el desarrollo de la capa espiritual aparte de las posturas físicas (asanas); como por ejemplo, ejercicios de respiración (pranayama), meditación (dhyaana), conocimiento de los textos sagrados (jnana yoga), canto y oración (mantra) y servicio a la sociedad (karma yoga). Además, el yoga se basa, en una filosofía y práctica ante la vida que le permite a uno pensar, hablar y actuar desde una mente más quieta y enraizada en el amor profundo hacia la existencia entera con todas sus manifestaciones, incluso su propia patología o lesión (bhakti yoga).

Probablemente, la diferencia más marcada entre el Yoga Terapéutico y otras terapias de tratamiento corporal es que el Yoga Terapéutico concibe el humano como una globalidad, en el que hay diferentes capas que requieren una atención y práctica para una auténtica metamorfosis en el cuerpo-mente-alma que somos.

¿Qué pensáis respecto a la opinión del que la intervención/mejora sobre la salud solo es un efecto secundario del Yoga pero no su meta principal?
¿Hay una separación entre el cuerpo y la mente? Cada pensamiento se somatiza; el juicio más sutil que hacemos, puede reflejarse en una liberación determinada de hormonas, en una ligera apnea inconsciente o en una pequeña contracción muscular en la cara, por ejemplo. Si cada pensamiento nos afecta, ¿no afectarán a la mente las desalineaciones biomecánicas, el dolor o una lesión?

 Por otro lado, también es de primera importancia reconocer la realidad de que existe una nueva demanda social. Hay muchas personas, y considerables profesores de yoga incluidos, que han empezado la práctica de yoga no por su transformación espiritual, sino porque han oído que el yoga les podría aliviar su dolor de espalada, rodilla o recuperar de una lesión. Esto es simplemente lo que sucede cotidianamente. No creemos oportuno juzgar si esto es bueno o malo. Cada uno empieza su práctica por sus razones y después la práctica hace su magia por sí misma. La cuestión es que ante esta demanda, no es tan fácil encontrar instructores de yoga con una preparación avanzada en el aparato locomotor fundamental para saber cómo abordar las patologías y lesiones en sus clases regulares. Y si no para mejorar, como mínimo para no agravar su condición.

A menudo oímos de personas que han empezado la práctica de yoga por un problema físico y que se agravó con la práctica. ¡Nos entristece profundamente que se desaproveche de la oportunidad de poder ayudar a una persona por falta de un conocimiento que está disponible!

 Los maestros no son solamente espirituales. Hay grandes maestros científicos que han dedicado su vida entera a estudiar el cuerpo humano y sus maravillosos mecanismos, demostrando en sus estudios la gloria de la naturaleza. ¿Vamos a desaprovechar todo este conocimiento por una separación mental que hacemos entre cuerpo y mente?

Cuidar el cuerpo, es cuidar la vida, y cuidar la Vida es conectar y vivir armónicamente con Dios. Para nosotros, cuidar la salud tanto física como mental es como una oración, un poema escrito en acciones, a Dios.

¿Qué es lo más importante que se debe conocer sobre el Yoga Terapéutico, en vuestra opinión?
Como profesor de yoga, pregúntate seriamente: en tus clases regulares, ¿cuántos alumnos tienen dolor de rodilla, muñeca, lumbares, artrosis, discopatías y otras dolencias o lesiones mal curadas en el aparto locomotor? ¿Cuántos de ellos tienen las piernas arqueadas, los arcos plantares caídos o la curvatura lumbar aplanada…? ¿Cómo crees que estas desalineaciones les afectan en la propia práctica de yoga? ¿Empujar su cuerpo en una asana les va alinear fuera de la esterilla?

Las lesiones y el malestar no sólo afectan a la tercera edad, nos afectan a todos.  El Yoga Terapéutico no es solamente para gente mayor, lesionada o principiantes. Un adolescente deportista puede tener una escoliosis. Un profesor veterano de yoga puede estar lesionado o lesionándose de forma inconsciente por su propia práctica.

 Todos tenemos anormalidades y asimetrías en la alineación de nuestros huesos o en la tensión muscular, incluso sin que seamos conscientes de ello; por ejemplo, rodillas en valgo (en -X-), un hombro más alto que otro, pies planos o cavos, curvaturas escolióticas, anomalías en la posición de la pelvis, una tendencia crónica a inclinar el cuerpo hacia adelante, etc. Las anomalías en la alineación ósea y articular desencadenan una respuesta miofasical para mantener la funcionalidad del cuerpo dentro del desequilibrio que, en mayor o menor medida, todos tenemos. Dichas tensiones miofasciales y los conflictos mecánicos articulares son los responsables, conjuntamente con la inadecuada utilización del cuerpo, de la mayor parte de procesos dolorosos y patológicos del aparato locomotor.

El conocimiento de cómo abordar estas desalineaciones y dolencias está disponible para nosotros. El conociendo es un camino a la libertad ya que la ignorancia nos lleva al sufrimiento.

La cuestión es que muchos de nosotros, como instructores de yoga, creemos que la consciencia kinestésica, corporal, es suficiente. Es decir, que nos decimos que al sentir el cuerpo y sus sensaciones ¨yo ya sé qué y cómo hacer¨. Y no es cierto. Hay desalineaciones y afecciones que no son percibidas con la consciencia corporal.

 Existe toda una ciencia del movimiento que es de alta importancia de conocer si nuestra mayor práctica es a través del movimiento.

¿Cuál es vuestro enfoque especial del Yoga Terapéutico?
Nosotros en FisiomYoga unimos la práctica de yoga con la fisioterapia y la osteopatía. Ofrecemos un conocimiento avanzado y profundo de la anatomía, fisiología y patología humana y totalmente aplicado a la práctica de yoga.

De hecho, cada año asisten tanto instructores de yoga de todos los estilos como médicos y fisioterapeutas, comentándonos que comprenden mejor los procesos patológicos y por lo tanto, pueden servir más adecuadamente a sus pacientes gracias al conocimiento que han adquirido en nuestra certificación .

Llevamos ya 20 años dedicándonos a la enseñanza de Yoga Terapéutico y gracias a esto sabemos enseñar a nuestros alumnos paso a paso:

  • Programar clases para más de 40 lesiones, alteraciones biomecánicas y patologías.
  • Abordar  con seguridad estas alteraciones a través de ejercicios clásicos de yoga y muchos otros que hemos desarrollado a lo largo de los años.
  • Ajustar estos cientos de posturas y ejercicios para las habilidades fisiopatológicas de sus alumnos con mantas, bloques, cinturones, diferentes tipos de pelotas, una silla e incluso la pared.
  • Practicar con alineamiento correcto para diferentes tipos de personas. Aprenden cientos de posturas, su alineamiento y variaciones para que puedan ajustarlos a todo tipo de necesidades y habilidades, y todo de una manera estructurada y eficaz.
  • Colaborar con seguridad con profesionales sanitarios y centros de rehabilitaciones y hospitales; entendiendo su lenguaje sanitario y sabiendo cuándo derivarles su alumno para dar una mejor respuesta y así, llegando a transformar su vida.
  • Aplicar las historias de la mitología hindú en la práctica de yoga para que sirvan como fuentes de inspiración y así vivir con un corazón más abierto y ligero. Esto inspira a nuestros alumnos incorporar la parte psicoemocional y espiritual incluso en sus propias clases regulares.

De hecho, no existe otra formación que se centre en el aparto locomotor y además que todo el conocimiento impartido esté fundamentado en cientos de estudios científicos citados.

Tenéis una certificación de la Universidad La Salle de México. ¿Qué significa para vosotros?
La Universidad La Salle en México ofrece ahora nuestra formación como un Postgrado Universitario. ¡Es la primera vez que una universidad ofrece una formación de Yoga Terapéutico en toda América Latina!

Nos emociona mucho que el yoga reciba este reconocimiento porque esto significa que nos encaminamos a ofrecer esta práctica tan poderosa y transformadora, enfocada a la liberación del sufrimiento de todos los niveles, en hospitales y centros de rehabilitación.

En relación a los centros hospitalarios y de rehabilitación, cuando uno sufre de cualquier tipo de dolor, sea cual sea su origen, es cuando más abierto está a las enseñanzas de la desidentificación con el cuerpo y la mente. ¿No es este un buen momento para introducir el yoga?

www.yoga-terapeutico.com

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