En esta sección Javier Ruiz Calderón ofrece respuestas a nuestras dudas sobre el yoga, su filosofía y sus técnicas desde una visión de la tradición yóguica actualizada y crítica. Todos estamos invitados a escribir a Javier a info@yogaenred.com planteando nuestras dudas o incertidumbres.
Pregunta: «¿Qué es la entrega («surrender» en inglés) de la que hablan los maestros?»
Respuesta: La esencia de la actitud religiosa o (para quien no le guste la palabra «religión») de la espiritualidad es la entrega a lo divino. Lo divino es una realidad o proceso trascendente a la experiencia ordinaria que tiene la capacidad de salvarnos o liberarnos de nuestras limitaciones y negatividades cuando nos entregamos a él. En la tradición del yoga hay muchas ideas distintas de lo divino: diferentes formas de un Dios (o Diosa) personal, como Shiva, Krishna, Devi, etc.; lo Absoluto suprapersonal (Brahman); la experiencia de la emancipación (Kaivalya), etc.
La entrega tiene dos aspectos: pasivo y activo. La entrega pasiva consiste en ver todo lo que existe como manifestación de lo divino o de su voluntad y, en consecuencia, aceptarlo con alegría y confianza como un don o regalo (prasad) divino. (Por eso a lo que nos pasa ahora se lo llama el «presente».) Aunque no coincida con nuestros deseos o no lo entendamos, todo lo que nos sucede es siempre lo mejor para nosotros, y la actitud más coherente desde la práctica del yoga es no solo la de ecuanimidad ante nuestras circunstancias sino la de su celebración gozosa y agradecida. Es lo que los Yogasutras llaman santosha (contento) e ishvarapranidhana (entrega a Dios).
Esa es la entrega pasiva, imprescindible para que haya verdadera espiritualidad. Pero no basta con ella. La entrega también debe ser activa para no caer en el quietismo o el «espiritualismo» tamásico, que es la caricatura de la espiritualidad. La entrega activa consiste en cumplir la voluntad divina, es decir, en responder dinámicamente a la llamada de la Libertad (mukti) tal como nos la transmiten las tradiciones del yoga. Esa respuesta es la práctica (sádhana) o disciplina espiritual. Cada tradición de yoga tiene su propio conjunto específico de prácticas, y muchas escuelas y maestros enseñan alguna forma de yoga integral que combina prácticas de las diferentes tradiciones. La dedicación entusiasta (en-theós: poseído por un dios) a la práctica de nuestra forma de yoga es, pues, la manera activa en la que los aspirantes a yoguis nos entregamos a lo divino.
En resumen: la entrega o «rendición» (surrender) a lo divino que nos piden todas las espiritualidades, incluida la del yoga, consiste inseparablemente en 1) la aceptación gozosa y agradecida de lo que nos sucede y 2) una dedicación «intensa y continua» (YS) a la práctica espiritual.
Javier Ruiz Calderón (Shánkara) es doctor en filosofía especializado en filosofías y religiones de la India. Lleva cuarenta años estudiando y practicando yoga, vedanta y meditación. Enseña esas disciplinas, así como hinduismo, sánscrito y canto védico, y ha publicado seis libros y docenas de artículos sobre esos temas.
Próximas actividades: 8-12 julio: Curso de verano en El Escorial: «La India de Gandhi y la India de hoy». 30 becas para oyentes (www.institutodeindologia.es). Octubre 2019 – junio 2020: Madrid y a distancia, sábados: «Estudio de las escrituras del yoga y el vedānta: La Bhagavadgītā» (www.ashtanga-yoga-alcobendas.es) e «Introducción al advaita vedānta. El yoga del conocimiento» (www.ashtangaciudadjardin.es). Entre semana: «Yoga, filosofía y meditación» (jruizcalderon@yahoo.es).