Consigue tus metas «momento a momento»

2013-07-23

¿Alguna vez has dudado en tomar decisiones y terminado atrapado en una situación en la que ya no sabías que hacer? Estás esperando que venga algún tipo de señal para indicar que todo está bien, algo así como la luz verde del semáforo: adelante, puedes pasar. Pero a veces podrías estar esperando eternamente y el semáforo no cambia de luz, simplemente porque no te sientes seguro para el desafío. Por Koncha Pinós-Pey para Espacio MIMIND.

Pasear feliz

Podría ser que tuviéramos un pensamiento tan limitador que estemos poniendo nosotros mismos los obstáculos, y al final acabemos rebajando los objetivos porque nos parece lo más fácil.

De acuerdo, es verdad que yo misma he recomendado el discernimiento sabio y la prudencia . Pero cuántas veces usamos esos mismos argumentos como excusas para salir directamente de nuestra zona de confort. Seamos realistas: pidamos lo imposible. Porque si buscamos la dilación para justificar que hay escasez de amor, de trabajo, de recursos en nuestras vidas… puede resultar razonable o falso. Sí, a veces acabamos dilatando las cosas más comunes por miedo a obtener lo que más amamos.

El dilatar o procastinar no es ir a ninguna parte, sino todo lo contrario.

Si esta noche volviendo a casa en el coche te empezase a doler la cabeza tanto que tuvieras que ir directamente al hospital y en urgencias, tras hacerte pruebas rápidas, finalmente te dijeran que tienes un tumor y no pueden salvarte…. ¿actuarias igual en tu vida?

Cuanto más tardemos en «tratarnos», más difícil será salvarnos. Las circunstancias ya nunca serán perfectas porque nunca lo fueron… y no tendríamos que esperar lo mismo para llegar a ninguna parte. La verdad es que probablemente nunca pensemos igual.

Cuando evitamos la adopción de medidas a menudo es porque hemos creado tantas resistencias en nuestra propia mente que ya no podemos saltarnos nuestro ego. Nos hemos convencido de que lo queremos hacer es ya imposible, es difícil… Pero ¿es eso realmente cierto… o es otra técnica de evasión de nuestro querido ego?

Crear confianza, crear momentos

Momentum es una de esas hermosas palabras latinas que nos sitúan en el fenómeno de la autoperpetuación… Eso es lo que hace tan poderoso el “perpetuum mobile”. El ejemplo perfecto que se me ocurre es una bola de nieve rodando por una ladera nevada. ¿Que le sucede? Crece y se acelera en el camino. ¿Cómo podemos usar el impulso del momento para lograr tener una mirada profunda y caminar hacia lo que queremos?

En lugar de bloquearnos con excusas que no llevan a ninguna parte, tenemos que crear algo de vacío que impulse el momentum. Es más fácil de hacer que de describir. Esa gigantesca bola de nieve en rápido movimiento que comenzó siendo pequeña y lenta, siguió creciendo simplemente porque seguía moviéndose. No siempre hay que lanzarse a las cosas como un cohete, pero necesitamos comenzar a hacer vacío para poder movernos y mantenernos en movimiento a fin de que podamos construir algo con un impulso auténtico.

Tener claro lo que queremos es la mejor manera de crear la motivación genuina. Esto significa que cualquier medida o sacrificio que tengamos que hacer será más fácil en la medida que avancemos. Finalmente, las acciones que realicemos requerirán menos esfuerzo, y comenzaremos a disfrutar de hacer vacío, sintiendo más plenitud y más motivación a la vez.

3 maneras de construir el Círculo Virtuoso del Momento a Momento

1) Comprométete en adoptar las medidas de acción que sean necesarias. Eso quiere decir empezar a “enfocarte”. Una de las cosas que puede impedir que avancemos es que no seamos capaces de hacer un compromiso con nosotros mismos. Desde el principio la motivación tiene que estar en la base, después el compromiso y finalmente la acción. Si queremos mantener nuestra motivación a la vista pero la mayor parte del tiempo estamos pendientes de las acciones de los otros, nuestro cohete perderá impulso.

2) Divide el proceso del momento a momento en pasos pequeños. Medita caminando poco a poco hacia una cosa pequeña; es mucho más eficaz que hacer grandes acciones. Es más fácil llegar al “nosotros mismos” desde lo pequeño, porque lo pequeño crea un impulso proporcional tan sólido que siempre produce resultados auténticos… siempre y cuando seamos coherentes. La motivación principal debe de ser estar presente en el momento a momento; será mucho más fácil para superar los obstáculos porque en cada paso, con cada respiración, tu confianza va a ir creciendo.

3) No dejes de enfocarte, aunque los resultados no sean los deseados inmediatamente. Muchas cosas acabamos abandonándolas porque queremos ver resultados rápidos. Queremos dejar de fumar, y después de tres sesiones de acupuntura abandonamos. No te obsesiones con el resultado; el camino es la meta, no te permitas desanimarte. En otras palabras, permítete centrarte en mantener las cosas en marcha… aunque no estés viendo el paisaje externo que quieres ver ahora mismo… Persevera. Céntrate en la construcción del impulso. Edison fracasó muchas veces antes de conseguir que su invento funcionase.

Utiliza el impulso de la motivación para no dilatar las cosas

Al pasar a la acción, la dilación se queda en el camino. Si haces algo pequeño cada día para avanzar, estás focalizado, centrado… y ya las excusas dejan de tener cuerpo. ¿Estas realmente motivado para eso que dices querer tanto? ¿Ya sabes que los objetivos y las metas son impermanentes en la vida? ¿Sabes que el compromiso con el crecimiento no se acaba nunca? Tal vez todo es mucho más fácil… Solo hay que estar motivado.

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