¿Eres un multitarea?

2013-10-31

Elimina las pantallas de distracción de la mente. Comienza por apagar la televisión, deja de lado el teléfono y cierra tu sesión de mail. Si aún no estás convencido de que te va a ayudar, intenta ver si eres capaz de hacerlo todo a la vez… ¿Por cuánto tiempo? En la siguiente fase, elimina el tiempo que pasas delante de las pantallas y mira cómo te sientes. Por Koncha Pinós-Pey para Espacio MIMIND.

Multitarea

Saquemos toxicidades de la mente. ¿Tienes demasiados pensamientos recurrentes? Son como notas mentales que hacen que tu mente esté cada vez más desordenada. Todos los asuntos pendientes agotan tu energía mental y acabas no haciendo nada. Para sentirte más descargado sigue este consejo: pon todo lo que está en tu mente en un papel o captúralo digitalmente en una imagen. Piensa ahora en esas cosas como si hubieses hecho un almacenamiento fuera del disco.

Entrena tu cerebro. Cualquier habilidad que merezca la pena requiere práctica. Invierte tiempo en aprender a entrenar tu atención o en dominar la meditación: ambas son grandes maneras de practicar la doma de la mente y mejorar su enfoque.

¿Cuál es la recompensa del enfoque o concentración? No solo vas a conseguir hacer más cosas sino que también disfrutarás de un gran flujo de energía cuando estés absorto en una actividad. Nada más te importa. La sensación de fluir crea una plenitud y un compromiso que aportan alegría muy sana.

Los niños a los que se permite jugar con varias pantallas a la vez, están siendo entrenados para distraerse y no para concentrarse. Más tarde en la vida tendrán problemas a la hora de tomar decisiones. Las investigaciones realizadas en la Universidad de Stanford en el ámbito de la multitarea han revelado que solamente un porcentaje de personas muy pequeño puede hacer dos o tres tareas a la vez bien… y esas personas son las que tienen una gran capacidad de auto-focus.

En realidad cuando estamos haciendo multitarea estamos multiactuando, alternando varias tareas y maneras de ser en un tiempo y espacio determinado. Las personas multitareas no entrenadas manifiestan más dificultad a la hora de manejar sus emociones que las entrenadas. Nuestros cerebros aprenden la capacidad de multitarea y luego piensa que es imposible adaptarse a hacer una, dos o tres cosas bien. Podemos entrenar a nuestro cerebro para poder focalizar bien.

«Naúfragos mentales»

Los investigadores descubrieron, por ejemplo, en el tema del correo electrónico, que si la persona se focalizaba, en realidad no tenía porque estar más de 20 minutos. Pero en la «realidad dispersa»  podía dedicar hasta seis horas. La multitarea se ha convertido en una forma de adicción. Por eso es difícil de parar… porque no se reconoce.

Unánimemente Stanford dice que los multitareas crónicos no entrenados muestran una variedad de déficits cognitivos, porque no pueden filtrar lo que es irrelevante de lo relevante. No pueden manejar bien la memoria, las prioridades y están crónicamente distraídos. Inician acciones o proyectos en su cerebro que no pueden acabar y pasan a otros; así acaban convirtiéndose en “náufragos mentales”.

La meditación en la atención plena ha demostrado poder ayudar a la memoria y al enfoque. Así, las personas entrenadas en meditación consciente pueden realizar tareas más largas y hacer menos cambios entre ellas sin tener emociones negativas. Tienen una memoria mayor y una gran resiliencia.

Para saber cómo llevas el tema de la multitarea prueba esto: tomate 15 minutos cada día para calmar tu mente, incluso si te sientes la persona más feliz del mundo. Concéntrate, escúchate y respira. Cualquier cosa que hagas en esos 15 minutos, te va a beneficiar muchísimo, así que trata de concentrarte en estar presente… apaga las pantallas y deja que penetren los beneficios de la atención plena y de estar presente en ti mismo.

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